domingo, 4 de noviembre de 2007

MI ÁNGEL

El día de la boda de mi Travolta conté que un tipo me recogió en una carretera oscura y me llevó a un hotel casi tan oscuro como la carretera para ponerme a salvo. Lo bauticé como mi ángel de Autopista hacia el cielo.

Semanas más tardes, en el mismo pueblo pero a mediodía, con sol, y una carretera más transitada, yo me dirigía a hacerme la prueba nº 4 que dio positiva cuando un tipo paró su coche, me miró, me sonrió y me preguntó ¿te llevo?.

Yo lo miré asombrada y dije que no con la cabeza. Pensé “la gente está flipá…”.

Hoy, no sé por qué, lo he vuelto a recordar y he caído en la cuenta de que el coche era el mismo y que quizás el tipo también. Y he pensado que quizás yo, que ya era buena sin saberlo seguí adelante ese día sin montarme en un coche ajeno, pero que la Porteña, a la que no he vuelto a ver desde entonces, seguro se montó con él. Que ella siempre se subió en los coches en mitad de la carretera.

Y mi ángel se la llevó de paseo para que yo pudiera disfrutar durante 9 meses sin que la Porteña me incitase en las noches al placer y a los vicios.

Mi Michael Landon por supuesto enmascaró su tierna cara que se le quedó tras la Casa de la Pradera y su apariencia era de chico malo. Si no, la Porteña no se abría subido nunca al coche y se lo abría comido de un bocado antes de la primera curva.

Me encanta la historia y es verdad. La realidad siempre supera a la ficción.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

POSDATA:
Esto de no beber también me convierte a mí en un ángel para los amigos que siguen disfrutando del ron… Y mientras ellos beben, yo duermo en alguna parte, y luego al despertar conducto su 4x4 igual que el ángel de autopista hacia el Cielo y los llevo a casa, dejando mi coche en el pueblo pesquero de marras donde los ángeles se aparecen.

Lo malo de esto es despertar tan temprano y esperar a que el menos resacoso se despierte y me lleve a por mi coche, que ya hay sol y me pierdo el paseo por la playa el último día de descanso de este maravilloso puente.

Anónimo dijo...

No sé qué decir...
Por supuesto, enhorabuena. Aunque tendré que quitar el blog de la categoría de eróticos y echaré de menos a la porteña.
Qué fuerte¡

Anónimo dijo...

Me alegro de que te sientas tan bien. Realmente es maravilloso lo que te ha pasado. Tu mejor aventura. ¿Quién lo iba a decir? Realmente la realidad supera a la ficción.

Pero la Porteña no se ha ido. La Porteña eres tú. Y cuando te pase el susto inicial...ya saldrá, ya,...

Mis mejores deseos

Anónimo dijo...

Ya decía yo que era raro verte comer una manzana a media mañana y sin humos.
Me alegro mucho. Se te ve muy bien