jueves, 22 de marzo de 2007

LA ABUELA

Tiene 36 años, pero es mayor. La espalda y el cuello lleno de contracturas que no sanan con relajantes ni con antiinflamatorios, sino con caricias, con atención, con cariño, con besos, con polvos,...
A veces pone cara de abuela rancia, con las cejas, la frente y la nariz fruncidas. La boca de asco, los ojos de asco. Parece que está a punto de escupirte.. Pero si la miras, sonríe con una sonrisa falsa y suelta un "jam".
Cuando está relajada resulta muy divertida. Y tiene una risa bonita, alegre, contagiosa, con 2 hoyuelos en las mejillas. Pero la saca poco. Ahora mucho más.
Ya va resolviendo el tema de su agresividad mediante el amor, la terapia individual, los grupos,... Pero le cuesta un dineral y eso puede provocarle de nuevo agresividad.
Es de complexión fuerte. Viste de forma cómoda, sin tacones, como las abuelas. Usa bragas grandes, calcetines abrigados, sujetadores que le tapan todo el pecho. Es la abuela.
Es un 6. Está definida.
Nunca ha tenido familia. Ahora está empezando a tenerla. Pero está alejada. Su familia es la niña chica, su mayor apoyo, su tabla de salvación.
Hoy en día no podía imaginarme a la abuela sin la niña chica. Sería una abuela abandonada en una gasolinera.
Se tira unos pedos enormes, que asustan a todos los niños y adultos del vecindario.
Pero ella se ríe. Y la niña chica también.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Preparaos que la agüela tiene previsto su plan de acción. Llegará en un carrito empujado por el aguelo y un chupe....Ah! y no está definida, ahora dicen que es un 9...pero no se lo cree mucho.